Creo que cuando la noche se vuelve realidad y cuando ya no tengo nada en que pensar o esperar te extraño y te comienzo a esperar, no me importa si te vi hace un instante, si te vi ayer, si hablamos en este momento. Cada día te espero, te espero hasta que me rindo y me voy pero siempre con la esperanza de que al otro día estés y seamos lo que fuimos alguna vez cuando la noche se volvía realidad, una realidad mas soportable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario